Los clientes suelen no tener claro si la forma de apriete más adecuada en su caso concreto es mediante la aplicación de par o tensión. El apriete y la carga residual correcta del perno para mantener una integridad aceptable se pueden conseguir con ambas técnicas. Sin embargo, los dos métodos son muy diferentes y deben tenerse en cuenta varios factores antes de decidir cuál es la opción más apropiada.

La relación entre par de apriete y torque debe estudiarse con precaución, ya que es muy difícil indicar el rango de condiciones que experimentará una dispositivo de fijación.

 

Antes de comparar el par de apriete con la tensión, hay que entender cómo se comporta un tornillo apretado.

Los pernos están diseñados para estirarse solo un poco y este estiramiento es lo que hace que la junta permanezca unida. La elasticidad del material utilizado en la fabricación del perno hace que quiera volver a su estado original sin elongación. Esta tensión inherente del perno genera la fuerza de sujeción y, junto a la fricción de su rosca, evita que se suelte. Garantizar una adecuada fuerza de sujeción y su mantenimiento contribuye a garantizar que se genere suficiente tensión de resorte en el perno mientras se aprieta. Tanto las llaves dinamométricas como los tensionadores de pernos actúan para crear esta tensión de resorte al estirar el perno. Sin embargo, utilizan diferentes medios para lograrlo.

 

 

 

La diferencia entre par y tensión

El par es la medida de la fuerza que hace que algo gire, por ejemplo, la fuerza de giro necesaria para hacer girar una tuerca alrededor de las roscas de un tornillo.

La tensión es el estiramiento o alargamiento de un tornillo que proporciona la fuerza de sujeción de una unión.

Tanto el apriete como la tensión de los pernos son formas ampliamente aceptadas de sellar una junta. Cada una de ellas tiene diferentes ventajas e inconvenientes y se adapta a distintos tipos de aplicación.

 

Torque y fricción
La fricción desempeña un papel muy importante en una operación de apriete. Se calcula que entre el 10 y el 15% del par de entrada estira realmente el tornillo. El 85-90% restante del par de apriete se utiliza para superar la fricción entre las roscas y bajo la tuerca o la cabeza del tornillo.

Para el mecánico de taller que necesita cambiar una rueda de coche o desmontar un motor, una llave dinamométrica manual suele ser suficiente para realizar el trabajo.

Pero para las aplicaciones industriales, como las bridas de las tuberías en la industria del petróleo y el gas, se necesitan herramientas más potentes. La mayor potencia de par requerida y el mayor número de tornillos hacen que las llaves dinamométricas con accionamiento hidráulico sean una opción popular para estas aplicaciones.

Una llave dinamométrica de accionamiento hidráulico utiliza energía hidráulica de alta presión suministrada por una bomba de aire, batería o eléctrica. Cuanto mayor sea la presión, mayor será el par aplicado al tornillo.

La unidad de medida del par de apriete suele expresarse en Ft.lbs o Nm.

 

 

Torque vs. Tensión: ¿Cuál es el mejor?

La respuesta a la pregunta de par o tensión depende de varias cosas;

  • ¿Qué tan críticas son las juntas?
  • ¿Cómo de accesibles son los componentes de la junta?
  • ¿De qué equipo se dispone?
  • ¿Cuántas juntas se van a trabajar?
  • Presupuesto disponible
  • ¿Cuáles son las habilidades de las personas que realizan el trabajo?

El torquing es flexible, versátil y menos costoso. Sin embargo, sería un error tomar la decisión sólo por el presupuesto. Solucionar un problema en una junta de brida crítica en el futuro podría suponer un coste importante.

Los tensores ofrecen más precisión. Son más rápidos, suelen requerir una mayor inversión y son más complejos. Además, hay que tener en cuenta que si la holgura entre los espárragos es escasa, puede ser necesario tensar algunas juntas por etapas (en lugar de la situación preferida, en la que todos los pernos se pueden apretar simultáneamente). Si este es el caso, debe seguirse un patrón de atornillado adecuado.

Una vez determinados todos estos datos, ¿Cuál es el método más adecuado?

La decisión de usar par o tensión se debe tomar dependiendo de las necesidades de operación y del presupuesto. Si la decisión entre par o tensión se basa exclusivamente en el presupuesto, independientemente de las necesidades de operación, la reparación de cualquier problema que surja en la brida posteriormente puede hacer que el presupuesto crezca en grandes proporciones para su reparación.

Es necesario comprender sus necesidades. Si sus aplicaciones requieren del apriete de muchos pernos, utilizar para ello una llave dinamométrica de gran calidad es una buena opción. Sin embargo, si se trata de un caso de recorrido crítico y necesita resultados precisos y carga en los pernos homogénea, merece la pena optar por el tensionado pese al posible coste adicional.

Ambas gamas de herramientas tienen sus ventajas y sus desventajas y es importante utilizar el método recomendado por el fabricante.